martes, 19 de noviembre de 2013

Magdalenas de jamón serrano y Parmesano



Unas magdalenas saladas, originales, con personalidad y carácter. Un bocado delicioso. Así podríamos definirlas :-)
 
En esta Happy Receta, tanto los huevos como el queso son alimentos que contienen el aminoácido esencial Triptófano. Es necesario para la síntesis de un neurotransmisor cerebral, la Serotonina. Entre sus múltiples funciones, se encuentra la de producir sensaciones de bienestar, por lo tanto, mayores emociones positivas con el consumo de estos alimentos :-)

En otoño y en invierno me encanta cocinar utilizando el horno, puesto que las temperaturas empiezan a bajar y apetece sentir su calorcito. Cuando descubrí esta receta leyendo por ahí (esta vez en un fascículo de la colección “Minipastelería y Delicatessen dulces y saladas”) no dudé ni un segundo que las quería probar. Y me sorprendieron muchísimo. He realizado algunos cambios, por ejemplo he sustituido la mantequilla de la receta original por aceite de oliva. ¿Y el resultado? Es una opción más sana, quedan más esponjosas y su sabor combina a la perfección con el jamón y el Parmesano. 

¿Te atreves a probar estas sorprendentes magdalenas? :-)





Ingredientes (para 12 unidades):

- 4 huevos.
- Una cucharada sopera de queso Parmesano rallado.
- 3 lonchas de jamón serrano o su equivalente en taquitos.
- 100 ml. de aceite de oliva (si es Virgen Extra, mejor).
- 150 g. de harina.
- 1 cucharilla pequeña de levadura química (tipo Royal).
- 1 pizca de pimienta negra molida.
- 1 pizca de sal.

Preparación:

- Tamiza juntas la harina y la levadura en un cuenco. Por otro lado, bate los huevos con la pimienta negra molida y la pizca de sal (poca cantidad porque el jamón y el queso tienen un potente sabor) unos dos o tres minutos hasta obtener espuma y un color blanquecino.

- Precalienta el horno a 180º C con calor arriba y abajo. Añade el aceite a los huevos y remueve. Incorpora la harina tamizada con la levadura y bate enérgicamente para evitar que se formen grumos. Y por último, el queso Parmesano rallado y el jamón cortado en trocitos pequeños o en taquitos. Mezcla todo bien.

- Distribuye la masa en moldes de papel. No los llenes hasta el borde, porque las magdalenas subirán un poco cuando se cuezan.

- Hornea durante 15 o 20 minutos. Deben quedar doradas e hinchadas. Pincha con un palillo para comprobar que están cocinadas, debe salir seco y limpio. Deja entibiar unos minutos con la puerta del horno abierta. Saca y deja enfriar sobre una rejilla.

Ideas para la hora de servirlas:

- Pueden constituir un entrante o aperitivo fantástico, acompañadas de una ensalada a tu elección. 

- Otra opción, junto a algo de fruta y un café, compone un desayuno o merienda ideal para los menos golosos. 

En cualquier ocasión, ¡dejarás encantada a tu familia y a tus invitados! ¡Que seas muy feliz! :-)
                                




miércoles, 13 de noviembre de 2013

“Sorpresa” gratinada con bechamel y queso



¡Hola a todos! La Happy Receta de hoy es coliflor gratinada. ¿Por qué la he llamado “sorpresa”? Porque para aquellos a los que no les gusta la coliflor, sienten una especie de aversión por ese alimento y se niegan a probar cualquier plato que la contenga. Así que ya sabes, si hay alguien en casa a quien no le gusta demasiado la coliflor, ésta es una manera perfecta de cocinarla, porque… ¡la salsa y el queso camuflan o enmascaran su sabor! Y como es una comida tan sana, merece la pena probarla ¿no crees? ¡A lo mejor te sorprendes! :-)
 
El principal componente de la coliflor es el agua. Se considera buena fuente de fibra, vitaminas y minerales. Tiene escaso aporte calórico y contribuye a la prevención de algunas enfermedades. Un alimento saludable y ligero. 

Por otro lado, en esta ocasión, los alimentos que contienen Triptófano y nos harán sentir más felices son los lácteos. Están presentes en la leche con la que se prepara la bechamel y en el queso. La bechamel es una salsa que me encanta, y el queso fundido está buenísimo :-)




Ingredientes (para 4 personas): 

- Una coliflor.
- 50 g. de mantequilla.
- 50 g. de harina.
- 600 ml. de leche.
- Un trocito de cebolla picada (como un cuarto de una cebolla mediana).
- Sal, pimienta negra molida y nuez moscada molida.
- Queso rallado para gratinar (el que más os guste: Mozzarella, Emmental, Cheddar…o una mezcla de varios).


Preparación

- Prepara la coliflor: quita las hojas verdes, lava y corta en ramitos.

- Lleva a ebullición una olla grande de agua con sal. Echa en ella la coliflor. Puedes añadir al agua de cocción un vaso de leche para que absorba el olor. También es importante no tapar la olla, porque si lo hacemos, el fuerte olor de la coliflor puede impregnarse en ella misma e interferir en el sabor. Hierve a fuego medio durante unos 6 u 8 minutos aproximadamente. Debe quedar crujiente, porque terminará de hacerse en el horno. Si se hierve demasiado y queda muy blanda, después de hornearla se romperá.

- Precalienta el horno a 180º C.

- Prepara la salsa bechamel: funde la mantequilla a fuego medio en una sartén antiadherente. Añade la cebollita picada y deja que se poche hasta quedar transparente. Cuando esté dorada, incorpora la harina y remueve con una cuchara de madera para ir deshaciendo los grumos. Hay que dejar que la harina se tueste para que luego no tenga sabor a cruda. A continuación, añade la leche caliente, sin dejar de remover con unas varillas o la cuchara de madera. Remueve constantemente para que la mezcla de leche y harina ligue sin grumos. Salpimenta y también pon un toque de nuez moscada molida, que da el sabor característico a bechamel. Sigue cociendo la salsa removiendo hasta que  espese.

- Coloca la coliflor escurrida en una bandeja o recipiente apto para el horno. Añade la salsa por encima hasta cubrirla. Espolvorea con el queso rallado.

- Mete al horno durante 10 minutos aproximadamente, hasta que el queso se derrita y quede dorado. Si quieres, puedes poner la opción de grill para que gratine mejor.

Y eso es todo. Anímate y lo comprobarás: ¡Delicioso!

¡Que aproveche! Cocina y sonríe :-)